30 de marzo de 2008

Macri silencia a los maestros porteños


El Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires sancionó una resolución destinada a los directores y maestros porteños. La 494.824, firmada por el director general de Educación, Luis María Rodríguez, impide que los docentes realicen declaraciones a los medios de comunicación masiva, que tengan salidas o que se reúnan en sus propias escuelas sin autorización oficial. La resolución determina que todo medio de comunicación que quiera hacer una nota sobre una escuela porteña “se debe contactar con la oficina de prensa para que lo atienda personal especializado para tal fin”… “Antes hablábamos con los medios, pero llegó la orden del Ministerio que dice que ya no podemos dejar entrar a los periodistas ni dar declaraciones, y tenemos que derivarlos a la oficina de prensa. Además, el gobierno de Macri cortó en nuestra escuela un subsidio por mantenimiento –de unos 6.000 pesos–, y el establecimiento, para la fotocopiadora, para lo que se rompa o para la limpieza del tanque de agua, tiene que utilizar la plata de la cooperadora escolar, que son fondos propios. Pero todo eso no lo podemos decir abiertamente porque no nos dejan hablar”, dijo un docente de una escuela de Palermo que, por obvias razones, prefirió no revelar su nombre.

La norma que hizo circular el Ministerio porteño también tiene un memo, el 403.198, emitido por la Subsecretaría de Inclusión Escolar y Coordinación Pedagógica, que impide a todos los docentes las salidas de las escuelas para cualquier tipo de reunión: “Conforme al enfoque de gestión adoptado por este Ministerio, no se autorizarán actividades que impliquen la salida de docentes.

En el gremio, el secretario general de UTE Capital, Francisco Nenna, denunció: “Tenemos reuniones con jornadas de reflexiones entre los docentes y directivos de las escuelas para tratar la problemática educativa, la planificación institucional y curricular, intercambiar opiniones e ideas acerca del trabajo, que es lo más rico y creativo de nuestro quehacer diario y eso también está planteado como una prohibición por el Ministerio de Educación. El memo plantea que los delegados gremiales no puedan reunirse ni salir dentro de su horario de trabajo, que es un derecho adquirido en los ámbitos gremiales desde hace más de 100 años”. [Diario Crítica, 30/3/08, edición impresa]